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03 septiembre 2006

El Universo que Esconden los Árboles





Los árboles urbanos son el sostén y el refugio de muchas formas de vida, que le traen color y alegría a la monotonía del cemento.

Muchas veces por desconocimiento, no le damos a los árboles urbanos la relevancia que tienen para nuestra ciudad. Incluso desconocemos que uno de sus grandes aportes es darnos el oxigeno (O2). Analicemos algunos ejemplos de bioconvivencia con la intención de destacar su importancia y señalar algunas razones de peso para que los caleños aprendan a cuidar, conservar y multiplicar sus árboles urbanos.

Para empezar con este ejercicio, dediquemos unos cuantos minutos a observar con atención el tronco de un árbol. Allí podemos ver cientos de organismos, incuso animales de mayor tamaño que viven su cotidianidad de la misma forma que nosotros lo hacemos.

Los árboles son el hogar de pequeños mamíferos como murciélagos y ardillas; en ellos habitan aves como la inconfundible torcaza y el colibrí, y reptiles como lagartijas e iguanas; en algunos lugares húmedos podremos encontrar ranas, además de una gran variedad de insectos como mariposas, chicharras y hormigas.

Cabe anotar que no solo son los animales los que utilizan como edificios de apartamentos a los árboles urbanos, con ellos cohabitan plantas como las araceas, bromeliáceas, musgos y helechos; hongos desde los microscópicos hasta las setas; líquenes ejemplo de trabajo mancomunado; así mismo, invisibles bacterias y protozoarios.

También los árboles urbanos alimentan diferentes especies de animales y de plantas. Las semillas frutos flores hojas, savia, néctar, polen y corteza que producen, son fuente de alimentación de los animales; mientras las plantas, hongos y algunos microorganismos aprovechan la savia, las hojas, las ramas muertas, el polvo que se acumula en las grietas, la humedad de su entorno o simplemente aprovechan la proximidad de sus ramas al sol.

Pero no todo para ahí, pues de ellos también dependen quienes siguen en la cadena alimenticia: águilas, gatos pájaros, carpinteros, pechirrojos, lagartos, arañas, etc.

Los árboles que vemos en la ciudad son quienes nos proveen de oxigeno (O2), a cambio de liberarnos de toxico bióxido de carbono (CO2) para hacer su alimento; a este fenómeno se le denomina fotosíntesis. Además filtran el exceso de partículas sólidas en suspensión en el aire (polvo, cenizas) que nos traen problemas respiratorios. Así pues los árboles limpian la atmósfera de contaminantes.

¿Por que las personas buscan la sombra de los árboles urbanos en los días soleados? Por que debajo de su copa se forma un microclima, agradable. Esto sucede gracias a la transpiración (vapor de agua) y a la exudación (agua en estado líquido) de los árboles, que refrescan y humectan el aire. También sirven como bloqueador solar, al interponerse entre los rayos del sol y la piel, evitando que esta se irrite.

El calor es mucho mas fuerte en las ciudades, que en la zona rural, debido al material en que estas fueron construidas (concreto, vidrio aluminio, asfalto, etc.). Los árboles urbanos cumplen la función de barreras naturales entre estas estructuras y los rayos del sol, actuando como amortiguadores del calentamiento.

Protejamos aquellos árboles que están a merced de individuos inescrupulosos y malintencionados. Eduquemos al respecto a nuestros hijos, familiares y amigos. Sembremos árboles en nuestros patios, antejardines, parques, separadores viales y sobre todo en el alma, para que de este modo, tengamos una mejor ciudad.

[1] Articulo matizado, para la Revista Cali Si. Por Isabel Cristina Cardona Santos (Jefe de Redacción)

3 comentarios:

Mr. White dijo...

Bueno, sacándo un poco el razonamiento ecologista, si tienes razón.
Y últimamente mas con el asunto de los árboles talados por la construcción del MetroPlús en Medellín. Lo positivo es que colocan otros árboles de distinta especie...en fin.

Fabian Armando Holguin Macias dijo...

Gracias Mr. White por la lectura.

Cambiar los árboles de un lugar, ya sea por tala o trasplante. Para mejorar la diversidad puede ser un punto a favor, acabar con un monocultivo puede ser. Pero hay que tener en cuenta, básicamente, que vamos a cambiar un árbol grande y frondoso, por un pequeño brote. Que tardara muchos años, (10, 20, 30 o más) en ser como su antecesor. En producir oxigeno, en la cantidad de biomasa, en su termodinámica, paisajisticamente y demás aspectos. En conclusión, para mi es muy mal negocio.

En Santiago de Cali nos quieren cambiar gigantes samanes y ceibas de varios decenios, por 10, 20 ó no se cuantos arbolitos, nos metieron los dedos a la boca

Anónimo dijo...

Soy una mujer que ha dedicado la mayor parte de su vida y sus acciones a protejer la flora y la fauna. Para mi un arbol es como un templo o un tesoro,y por principio tengo prohibido cortar alguno, cualquiera que sea el motivo en mi casa. No soy indiferente ante el arbol que arde en fuego por que el vecino quiere deshacerse de el y en lo posible educo al que pueda con mis razones ecologicas acerca de la importancia de los arboles en nuestras vidas. Pienso que es nuestro deber realizar conversaciones preventivas con nuestros vecinos, amigos, comunas, etc., sobre la importancia de ellos. Igualmente protejo cualquier ser viviente que vea en peligro o sufrimiento y asi se lo he ensenado a mis hijos y a las pocas personas que viven conmigo. Lastima que el mal llamado "modernismo" nos esta arrebatando los paisajes verdes y frondosos por frios condominios, como esta sucediendo en la zona sur de Cali, llamado anteriormente y con mucho orgullo el pulmon de Cali.